No sé qué paso…solo sé que…buscaba la verdad…y ahora estoy
aquí…
Era un día como otro en mi vida, simple y sencillo, era el
tercer cigarrillo de la mañana el que encendía mientras miraba a mi alrededor,
un cuarto obsoleto y lleno de papeles donde había escrito mil cosas, algunas
que creía correctas y otras que sencillamente venían de la combinación de una
bebida energética y mis pocas ganas de dormir.
- El misterio del hotel abandonado “Dreamcatcher” …-
Leía en voz alta una hoja de papel donde venia anotado
aquella frase y una serie de datos e información, sin embargo, a mi parecer
aquello sonaba más a una de esas novelas de misterio barato, donde al final, el
villano era el dueño del hotel y engañaba a los curiosos con cuentos del mas allá,
para evitar entraran o se quedaran y el pudiese buscar un tesoro o algo
similar.
Sin embargo, la historia de este hotel era algo macabra
según decía el documento que había recibido junto con la orden de investigar
este sitio, en aquel lugar habían muerto alrededor de 10 jóvenes mujeres, todas
miembros del mismo grupo escolar que se había alojado ahí en un viaje. Se decía
que había sido por haber descubierto en el bosque a una bruja que las asesino, bebió
su sangre y comió su carne para no dejar evidencias, además de así mantener su
belleza.
- Una peculiar y fantástica manera de describir el
asesinato, la mutilación y el canibalismo-
Indicaba en voz alta mientras observaba a los alrededores,
el tiempo había transcurrido muy rápido y había estado tan metido en mis
pensamientos que no notaba había llegado a una vieja tienda donde acostumbraba
comprar varias cosas que necesitaría en el sitio que visitaría.
- Dame 2 cuerdas, 3 linternas, tres paquetes de pilas y dos
cajetillas de cigarros…-
El dependiente se había vuelto un gran aliado, ya que se
enfocaba solo en surtir el pedido, nunca hacia preguntas o hablaba lo
suficiente, sabía que yo no gustaba de larga charlas o de cuestionamientos, pero
ese día, sucedía la primera cosa extraña.
- Porque no te llevas esto…es posible que también la
necesites en algún momento-
Frente a las cosas que ya le había solicitado, me dejaba un
hacha, de mango corto y fácil de manejar, mis ojos se detuvieron brevemente en
aquel objeto y luego en el sujeto, no sé qué paso, pero sentí la necesidad de
hacer caso a su sugerencia y llevarla.
- Posiblemente piense que tendré que cortar algunas ventanas
para entrar o quien sabe…viejo loco-
Exclamaba mientras seguía mi camino, mi reloj marcaban las
19:00 hrs, el cielo había comenzado a oscurecer y la noche estaba a punto de
cubrir todo. Seguí las instrucciones del GPS y manejé alrededor de 100 km hasta
las inmediaciones de aquel hotel en medio de la nada, su aspecto no era tan
tétrico como muchos charlatanes en la televisión pretendían hacer verlo para
ganar rating.
- Bien, veamos qué hay de cierto en los rumores y terminemos
con esto pronto-
Mi trabajo era sencillo, debía acudir a este sitio, entrar,
grabar algunas cosas, verificar si efectivamente había eventos paranormales o
todo era una sucia treta de alguien para que el lugar no se vendiera o fuera
demolido por cualquier razón, llevar las pruebas al supersticioso cliente que
me había contratado para que tomara su decisión de comprar o no aquel sitio.
Bajaba las cosas en una maleta y veía alrededor, esta vez
para poder determinar la mejor forma de ingresar, pero las cosas parecían estar
sencillas, ya que la puerta principal no parecía bloqueada, de hecho, se
azotaba con el viento que soplaba en el lugar, por lo que podría entrar sin
preocupación.
- Que frió hace…-
Me decía a mí mismo mientras frotaba un poco mis manos, el
solo entrar a aquel sitio, me había hecho sentir una baja de temperatura
bastante anormal, pero lo atribuía a la construcción de madera y a la humedad,
por lo que no le di importancia y encendí la cámara y una linterna, era hora de
iniciar el trabajo.
Recorría la planta baja primero, el vestíbulo lucia muy
sucio y descuidado, de igual forma cruzaba una puerta que daba al enorme
comedor donde las mesas rotas y las sillas arrinconadas eran el escenario
perfecto para una de esas películas de miedo. Seguí recorriendo el lugar y
encontraba otra puerta, esta daba a una vieja cocina, donde encontraba a varios
pequeños y grandes amigos, llamados ratas, ratones, arañas y un sinfín de
insectos, pero también lograba iluminar algo con la linterna y era una tercer
puerta, un poco más pequeña, a la cual me acercaba y al abrirla encontraba los
interruptores de electricidad, al subirlos, aquel sitio se llenaba de luz, eso
era bueno porque ya no dependería de las linternas y podría usar las pilas para
otra ocasión.
Después de prender las luces, salía de aquel sitio y volvía
en dirección al vestíbulo, cuando al abrir la puerta, la vi, era una chica
joven, cabello corto y pelirrojo, su piel era demasiado blanca, casi
transparente, su mirada reflejaba cierta nostalgia.
- Hey, ¿tú qué haces aquí? -
- La Luz ha llegado a este lugar…tú has apartado la
oscuridad de este sueño…pero eso no les gustara a las sombras…-
Aquella enigmática chica me dirigía aquellas extrañas
palabras, pero antes de que pudiera responder algo o cuestionarle algo más, un
fuerte viento soplaba dejando entrar varias hojas de los árboles, lo que me
cegaba un poco y al recuperarme, ella ya no estaba ahí.
- Vamos Toshio, no pudo haber ido muy lejos y tampoco es
momento de creer en fantasmas…-
Me decía a mí mismo mientras observaba las viejas escaleras
del lugar y decidía subir, probablemente aquella mujer estaría arriba y sabría
el motivo por el cual ese lugar era temido o probablemente ella era la causante
de todos esos rumores.
Al llegar al segundo piso encontraba varias habitaciones,
sin embargo, todas estaban cerradas con llave y no podía abrirlas, por lo que
al recorrer una por una, tenía la sensación de que era observado, pero no daba
importancia, seguía con mi cámara grabando el lugar y esperando encontrar
respuestas. Finalmente encontraba una de ellas abierta, por lo que entraba y
notaba que, para el tiempo de abandono, estaba limpia, no había polvo o
telarañas.
- Posiblemente esa mujer es quien hace algo para que digan
que el lugar este embrujado…-
Decía en voz alta mientras lanzaba un bostezo, era raro pero
el solo entrar a esa habitación había hecho que tuviera mucho sueño, por lo que
enseguida lanzaba un segundo bostezo y posterior a esto me sentía algo mareado
y que algo recorría mis labios desde mi nariz, por lo que al pasar mi mano
notaba que sangraba, así que caminando un poco dejaba la cámara a mi lado y me
recostaba en la cama de esa habitación, la cual era suave y me daba cierto
confort, pero antes de ello al girar mi rostro hacia el diván que estaba cerca
de la ventana podía ver una silueta femenina cargando una muñeca, ambas parecían
reír de mí y desaparecían o eso creía porque a los pocos momentos perdía el
conocimiento.
- Has sido elegido…recupera los corazones perdidos y tal vez
con ello, la paz vuelva a este sitio…-
Era nuevamente aquella voz que había hablado conmigo en el
vestíbulo, quería responderle, pero no podía, quería dirigir mi mirada hacia
algún punto, pero parecía estar ciego, haciendo un esfuerzo sobrehumano,
lograba pasar mi mano por mi rostro y me asustaba, era como si me hubieran
borrado los ojos y la boca.
- Las sombras lo están haciendo, solo tú tienes la fortaleza
para imponerte y salir victorioso…-
Esas palabras eran confusas y sin sentido para mí, pero tal
vez no para mi cuerpo que comenzaba a reaccionar y con ansias y desesperación
buscaba una linterna que llevaba en mi bolsillo y la dirigía hacia mi rostro,
esto hacia que pudiera ver como la luz de ese objeto me deslumbraba un poco y
con ello terminar con esa pesadilla, no sin antes con el movimiento de mis
brazos, al dirigir la luz de la lampara a un punto, podía escuchar como varios
libros caían al piso.
- ¿Qué carajo está sucediendo aquí?-
Exclamaba agitado mientras notaba que, en esa habitación, ya
no había energía eléctrica, pero a las afueras si, por lo que, corriendo hacia
la puerta, trataba de salir, pero no me era posible, algo o alguien impedía que
saliera.
- Este jueguito ya me está fastidiando…-
Decía para luego ver la cámara y sentir la curiosidad de ver
todo lo que había estado grabando, para mi sorpresa desde que inicie la
grabación podía verse la presencia de varias chicas jóvenes, que paseaban por
el lugar, incluso mientras había estado en la cama, ellas se habían puesto a mi
alrededor y parecían ser las causantes de todo.
- Ellas no eran así, ellas eran inocentes y buenas…pero hace
años, un extraño hombre llego aquí, dijo que necesitaba algo de este mundo y
entonces comenzó a buscarlo en este hotel, la gente huía aterrada, porque aquel
sujeto era terrible, con un movimiento de un arma que portaba, transformaba a
la gente en seres oscuros que comenzaban a atacar a otros-
Cerca de la ventana, la misma chica del vestíbulo se
encontraba, esta vez su mirada estaba fija hacia las afueras del sitio.
- Cuando llego al salón de música de este hotel, ahí
estábamos las 10, protegiendo un sagrado objeto que nos habían encomendado
cuidar, pero este hombre…utilizo varias tretas inclusive su belleza y su
seductora forma de hablar y convenció a mis demás compañeras de que no tenían por
qué dar su vida por algo así, que ellas podían tener cosas mejores, desafortunadamente
ellas le creyeron…yo, yo no quise escucharlo y aunque trataba de convencerlas,
me fue imposible y una a una se fueron entregando a él, quien enterraba una
extraña llave en sus pechos y ellas desaparecían o eso creía yo…-
El relato de la chica era fantasioso, pero a la vez
demasiado intrigante por lo que no buscaba interrumpirla y la dejaba seguir.
- Una vez que tomo el objeto, sencillamente desaparecía en
un extraño portal negro y dejo el lugar, yo había aprovechado para huir y
cuando volví, me encontré con estas sombras que ahora viven en este lugar y que
son capaces de devorar la luz de todo aquel que entra aquí…si tan solo pudiera
entrar a esa habitación…-
Aquella sinceridad y tristeza en sus palabras me hacían
sentir algo por ella, me identificaba un poco con lo que sentía, sabía lo que
era haber perdido el valor en algún momento y estar escapando de ello, por lo
que sin decirle nada, simplemente tomaba el hacha y daba un par de golpes a la
chapa, logrando abrir la puerta.
- Aléjate de Aquí…¡¡VETE!!-
Gritaban las sombras, sin embargo, algo en mi me decía que
no debía detenerme, así que avanzaba por el pasillo aun cuando los objetos
volaban alrededor mío y trataban de golpearme.
- Es hora de que terminemos con este chiste macabro…-
Empuñando con fuerza el hacha, comenzaba a golpear la
puerta, no sabía porque ni como, pero al tomar esa arma era como si empuñara
otra muy diferente, una que estuviese ligada de alguna forma a mí, de hecho,
por un momento me parecía ver como esa hacha se había transformado en una
especie de espada con forma de llave.
Finalmente, después de varios golpes, lograba atravesar la
puerta y lo que encontraba en el sitio me asombraba de gran manera, era una habitación
decorada de manera exquisita y la paz que ahí se sentía era tan grande que
dejaba caer el hacha y suspiraba fascinado.
- Toshio, te agradezco infinitamente lo que hiciste por mi…-
Mis ojos se abrían para ver como aquella joven mujer
ingresaba al lugar y caminaba con tranquilidad para luego detenerse ante unas
viejas fotografías donde se encontraba un grupo de mujeres jóvenes quienes lucían
alegres y contentas.
- Los corazones…son tan hermosos y frágiles, pero contienen
una fuerza y un poder extraordinario, eso es lo que los hace tan atractivos
para las sombras, tu corazón…puedo notarlo, aun hay oscuridad que oculta el
verdadero potencial de su luz…si lograras equilibrarlo, nada te detendría y conseguirías
las respuestas que has buscado…-
Aquella mujer parecía conocerme, por un instante estuve
tentado a lanzarme contra ella y obligarle a decirme la verdad, porque hacia
todo ese show y que era lo que buscaba, pero no era capaz de hacerlo, porque
dentro de mi sentía como si hubieran logrado derrumbar una de las barreras que había
impuesto para que la gente no me viera.
- Te haré un favor…te enviare a otro lugar, uno donde aprenderás
muchas cosas, más de las que yo misma se, mientras esperare aquí tu regreso y así
terminemos esta historia-
Al decir esas palabras, tomaba una especie de espejo, el
cual brillaba con fuerza y así mismo que arrojaba al piso, creciendo hasta
cubrir todo el piso, después mirándole podía notar que sostenía una especie de báculo.
- Salúdame a los maestros y sus heraldos, que tu luz sea tu
fuerza y tu guía…-
En ese momento el piso brillaba con tal intensidad que me
dejaba ciego, después sentía como mi cuerpo era arrastrado por una especie de
corriente, todo aquello me dejaba inconsciente, hasta que al abrir los ojos
notaba algo sorprendente.
- ¿Dónde estoy…?-
Exclamaba para mí mismo mientras me levantaba del piso y veía
un lugar nuevo para mi o tal vez no solo para mí, ya que frente a mi podía verla,
era una joven chica por cuya expresión, estaba igual de sorprendida y perdida
que yo, señal de que nuestra historia estaba a punto de entrelazarse y
comenzar.
Ficha de Personaje.
Toshio ¿¿¿¿????
Edad: 20 años
Lvl: 1
HP: 20 / STR: 5 / DEF: 5
Keyblade: ¿?
Medal: ¿?